Pronto cumplirá 45 años en el campo de las telecomunicaciones. Sus inicios fueron en Radio Panamericana y luego, junto con sus dos hermanos Héctor y Genaro, fundó Panamericana Televisión. Hoy, Manuel Delgado Parker es Presidente del Directorio de la más importante emisora del país, Radioprogramas del Perú.
No podría explicarse su vida sin las comunicaciones, su pasión más persistente. Trabajó cerca de ocho años en Puerto Rico y Los Angeles, siempre en el mismo campo, y ahora su corazón y su apuesta están en la radio. Lo acompañan sus hijos, "los mejores socios del mundo" que no sólo trabajan con entusiasmo sino que además "han sabido congregar un selecto grupo de colaboradores". Manuel Delgado Parker nos cuenta que, junto con sus sobrinos, vendió las acciones que les correspond’an al empresario Ernesto Schutz, "quedando éste con la mayor’a absoluta de Panamericana Televisión". A continuación su testimonio.

¿Cuál es la realidad de la radio en el Perú? ¿Cómo estamos frente a otros países?
El promedio de la radio peruana es muy bueno, estamos en la vanguardia en muchas cosas, sin embargo padecemos una legislación anticuada, de hace 40 años, en desacuerdo con los tiempos actuales, del cable y la internet.

¿Han solicitado algunos cambios?
Por cierto, y estos parten de una consideración muy sencilla: la radio debe y puede ser tratada como la industria y el comercio en general. Que se pueda trabajar en una economía de escala.

¿Qué papel ha cumplido la radio en la primera vuelta electoral?
La radio tomó hace 10 años una decisión muy importante: adaptarse al nuevo concepto de sectorización. Optamos por ser una emisora informativa en la que no se da opinión, con la garantía plena de pluralismo y objetividad. No ha sido fácil que eso se entendiera, pero hoy el público valora nuestra opción. Esa fórmula se ha aplicado en esta primera vuelta, como en anteriores elecciones y el resultado es positivo. Nos escuchan, nos creen, saben que no sesgaremos la información. Somos una tribuna democrática.

¿La televisión no afectó a la radio? ¿Por qué?
Es verdad que la gente pensó que la TV acabaría con la radio, pero en las comunicaciones los aportes tecnológicos suman, no restan. Hemos sabido, por cierto, adaptarnos. La radio informativa fue un giro oportuno, luego propiciamos la idea de la integración nacional en un país de geografía difícil. Después insistimos en la noticia como el producto único, en lugar de la música o el puro esparcimiento. La gente quiere estar informada rápido, con seguridad y oportunidad.

¿Pero usted también incursionó en la TV? ¿Cómo fue esa aventura?
Mis hermanos, junto a la familia Lindley, fundamos Panamericana. Fue una aventura, como usted dice, porque en 1959 no había aparatos como los hay hoy, era un objeto caro y exclusivo. Nosotros apostamos por la expansión del mercado porque el impacto de la TV es enorme. Transité muy de cerca en la TV, pero luego de algunos años decidí apartarme de ella como ejecutivo porque me picaba el diente por la radio.

¿Cuando se fundó Panamericana TV, era accionista mayoritario?
Panamericana nunca tuvo un dueño mayoritario. Eramos tres hermanos, cada uno con una minoría. Con el correr de los años, mis sobrinos y yo quisimos vender nuestras acciones. Mi hermano Genaro, en efecto, tuvo la oportunidad de adquirirlas, pero al final no se realizó la operación. Ernesto Schutz hizo una oferta conveniente y, sobre todo, cumplió y pagó conforme a lo convenido.

¿Por qué a su hermano Genaro no le interesó hacerse de las acciones, toda vez que ahora alega mayoría accionaria?
Posiblemente, en su momento, no lo vio como un negocio atractivo. Tenía entre manos asuntos muy importantes, aspiraba a otros planes más atractivos. No es fácil penetrar en la lógica de un empresario como Genaro, de amplio panorama y proyecciones.

¿Mantiene una buena relación con su hermano?
Nuestra familia siempre ha sido muy unida, tal como nos criaron nuestros padres. La relación con Genaro es la de hermanos, eso es imborrable, pero ya no somos socios. ¿Discrepancias? Las tenemos en las perspectivas empresariales, como ocurre comúnmente entre las personas.

¿Qué opina de su retorno al Perú?
Excelente. Ha venido a defender sus derechos y a hacerse presente en la actual coyuntura empresarial y política.

¿Qué opinión tiene acerca del debate sobre la TV abierta y la TV por cable? ¿Fue un error no dar igual cabida a los candidatos?
Hay que distinguir lo que son cambios de sistema (por ejemplo, el cambio de los dueños, nuevas generaciones que se hacen cargo de la TV, mayor énfasis al entretenimiento a costa de la información) de la coyuntura electoral concreta. En lo que conozco, Panamericana ha hecho esfuerzos para mantener objetividad y pluralidad. No soy el llamado a ser juez de la TV, actividad que dejé, en su tiempo, cuando opté por la radio. Lamento que se generalice sobre la TV y más aún que se les atribuya a los medios la responsabilidad sobre la transparencia del proceso.

¿Ha sido transparente el proceso electoral? ¿Hubo fraude?
No lo creo. Han habido fallas en el proceso operativo. Pero no es culpa de los medios, aun cuando se hayan cerrado, que algunos candidatos no hayan podido ganar adeptos o votos. Un mal candidato no se transforma en bueno porque cuente con la TV a plenitud. Con respecto a los medios, aparte de los temas de la libertad de empresa o de la libertad de expresión, que no están amenazados, habría que añadir que el mayor problema es el de la estabilidad financiera, la solvencia económica de los medios. Como ocurre con otras esferas, la editorial por ejemplo, hay que alentar una acción promotora para que las empresas de comunicación sean sólidas y, por lo mismo, menos sujetas a la coyuntura política.

¿De qué manera está contribuyendo al debate?
Si se refiere al debate nacional, ahí está la tribuna de RPP, puesta a prueba todos los días del año. Respecto al debate presidencial entre los dos candidatos de la segunda vuelta, RPP se ha sumado a otros organizadores (la Universidad de Ciencias Aplicadas, Panamericana, El Comercio) para propiciar el debate, que no se puede obviar. Se ha sumado el auspicio la CONFIEP y también esperamos que lo haga la Asociación de Radio y Televisión. El debate es de interés nacional y por eso es bueno que a él concurran todos los medios de comunicación.

¿Actualmente RPP atraviesa por uno de sus mejores momentos?
Sí. Estamos pasando por un momento muy grato, tenemos plena satisfacción del trabajo que se está haciendo. La tercera generación de los Delgado, que son mis hijos, han tomado prácticamente la dirección ejecutiva de la empresa o se han rodeado de gente muy valiosa en el campo profesional y gerencial. Creo que conformamos un equipo humano sumamente destacado de gran empuje y de gran entusiasmo.

¿Qué le parece el gobierno del presidente Fujimori?
Creo que él ha hecho un trabajo excelente en estos últimos diez años y eso no lo digo yo, lo dicen miles de peruanos. Ha organizado al país y creo que indudablemente es un mandatario que pasará a la historia como un buen presidente.

¿Y cómo ve al candidato Toledo?
Ha demostrado ser un candidato válido para los votos obtenidos. Es un hombre que ha sabido tocar los conceptos necesarios para aglutinar un importante porcentaje de la población y que ve en él a un líder capaz de alternarse en el poder.

¿Qué le pareció su actitud el domingo 9 de abril?
Bueno, ese día fue un día muy crítico, fue un día lleno de circunstancias inesperadas. El famoso sondeo de opinión que se hizo a boca de urna creó una absoluta confusión, eso es un asunto inédito en las encuestas. Hubo un elemento escondido que se pudo haber evitado si se daba más tiempo para su análisis. Pero en el periodismo hay un afán de la primicia y se dio la información (nosotros lo hicimos), cuando pudo, en mi criterio, sacrificarse la prontitud en aras de no alentar falsas expectativas.

Cambiando de tema. ¿Cómo se definiría Manuel Delgado Parker?
Yo diría que soy un entusiasta de la actividad que profeso. Considero que el comunicador debe buscar integrar a los peruanos, no importa dónde vivan, no importa dónde están.

¿Digamos que su pasión son las comunicaciones?
Sí, efectivamente.

¿Tendrá alguna otra pasión?
Sí, me encanta el golf y la pesca. También en eso me va muy bien.

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