Escribe: José Enrique Escardó quintopie@genteperu.com

"Quien quiere ser un creador ha de ser primero un destructor y quebrantar valores"

"Agitadores, crean un espectáculo, juegan con cabezas sólo porque quieren ser el número uno. Enemigos de la sociedad, cambian a la gente día tras día. Armas sociales que les hacen creer que los van a salvar. Cobardes, bastardos que no se avergüenzan de ser esclavos de la sociedad y se creen los salvadores de los que son diferentes".
('Orgy' en su canción "Social Enemies-Enemigos de la Sociedad")

LA REACCION DE UN IMBECIL

Esta semana me pasó algo que me dio asco. Maldita sea la persona que me ha hecho darme cuenta de hasta dónde llega la mediocridad, la insensatez, el complejo, la frustración, el odio, la incapacidad mental y la estupidez humana.

El susodicho se llama Harrinson Ram’rez y no hay otra forma de definirlo que ésta: pobre imbécil.

Les cuento por qué. Tengo un amigo que, aunque no veo hace años, recuerdo con mucho cariño. Es un buen tipo. De niño, él sufrió de una poliomelitis muy brava y se vale de una silla de ruedas porque tiene paralizadas las dos piernas y el brazo izquierdo. A pesar de todo, estudió y se desarrolló como profesor hasta el año pasado. Robert, así se llama, vivió en Chaclacayo, pero, para buscar una mejor oportunidad, se mudó a Lima a inicios de este año. Su viejo lo estaba ayudando con el billete, pero los médicos le diagnosticaron cáncer terminal y Robert ya no podrá contar con él, y pronto tendrá que sufrir la pérdida de su viejito. La semana pasada me llamó un pata de ambos y me comentó lo sucedido, así que decidí ayudarlo comunicando esto por email a la mayor cantidad de gente posible para que lo busquen si quieren clases de inglés, traducciones o nivelación para sus hijos. Y aquí viene la imbecilidad del Harrinson ése.

Cito un pequeño párrafo de lo que me responde: "No quiero ser una persona sin sentimientos, me compadezco de ese amigo suyo, pero él quizás tiene una oportunidad porque estudió en buenos colegios y privados. Pero ¿se da cuenta de la situación que vivimos ahora en el país y que mucha gente no quiere ver? ¿Acaso usted, que defiende por medio de su revista al 'gobierno' (entre comillas por que es una DICTADURA con mayúsculas) de este país, donde los maestros reciben una miseria y los niños y los jóvenes como yo no recibimos una buena educación porque los maestros, en lugar de pensar en sus clases, piensan más en pagar sus deudas, ya que el mísero sueldo que reciben no les alcanza para nada?".

La verdad que me entenderían mucho mejor si publicara toda la carta, en la que menciona a Montesinos, Blanca Nélida Colán y a otros que nada tienen que ver en el asunto.

Yo me pregunto, ¿en qué diminuto cerebro puede caber esta imbecilidad? ¿Cómo se le puede ocurrir a un ser humano mezclar las cosas y ponerse a hablar de política cuando hay un esfuerzo para ayudar a un ser humano en problemas? Incluso si todo lo que dice este personaje fuera cierto, ¿por qué degrada el acto más sublime que uno puede hacer, apoyar a un amigo en problemas, con su impertinencia? Este Harrinson tiene mierda en el cerebro y ya se lo dije por email, pero también le dije que iba a hacer pública su boludez.

Estoy harto de gente incapaz de reconocer su propia incapacidad y que le echa la culpa al primer chivo expiatorio que se le cruza. Este Harrinson debe ser de esos inconsecuentes que se compran galletas en la bodega y, mientras hablan de lo sucia que está la calle por culpa del alcalde, el presidente y toda su gente, tiran la envoltura al piso.

Mi amigo Robert tiene problemas y yo lo quiero ayudar. Pero tengo que encontrarme en el camino con imbéciles que, además, no me conocen y me juzgan. Harrinson no sabe que yo he estado casi 15 años ayudando a los pobres. No sabe que renuncié a mi tranquilidad familiar y económica desde los 15 años para irme a pueblos jóvenes a darle comida y educación a familias enteras. No sabe que he organizado programas de alimentación para asentamientos humanos durante más de 8 años. No sabe que he dormido en el piso frío de una iglesia abandonada durante dos meses en el valle del Colca mientras mis amigos se divertían en las mejores discotecas de Lima. No sabe que, en esas condiciones difíciles, amigos y desconocidos han muerto en mis brazos por enfermedades que nadie pudo curarles en éste y en anteriores gobiernos. Este pobre imbécil no sabe nada de mí y viene a juzgarme sólo porque tengo un punto de vista político diferente al de él. Me das vergüenza y asco, Harrinson Ramírez, tan pobre y sin educación que te comunicas conmigo por internet. ¡Qué tal concha!

Me da vergüenza y asco la gente, como tú, que es incapaz de reconocer que es culpable de su propia mierda y tiene que vivir echándole la culpa al gobierno. Toda esa gente, pobre o rica, que no es capaz de aceptar que no hizo las cosas bien y quiere crear zozobra en los demás para que nadie se dé cuenta de que ellos son unos mediocres, unos perdedores en la vida, unos incapaces por sí mismos. Y bueno, ¿qué se puede esperar de Harrinson Ramírez, hombre que no se da cuenta de que ha sido manipulado por alguna prensa y algunos políticos sinvergüenzas que le echan la culpa de sus propias estupideces a todo el mundo que está por encima de ellos?

¡Para incitar a muchos a apartarse del rebaño, para eso he venido!
Que así sea.

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