Socios mayoritarios del Jockey Club del Perú aseguran que la actual directiva hace hasta lo imposible porque las denuncias sobre irregularidades dentro del club hípico se mantengan en silencio.él ex presidente del Jockey Club del Perú (JCP) y representante de un mayoritario grupo de socios de esa entidad que defiende las propiedades y bienes de su institución, convertidas en patrimonio de la ciudad, lanza su voz de protesta, ante la perorata de la directiva actual del club presidida por Francisco Vainstein, quien trata de minimizarlos calificándolos de ser los responsables de "orquestar un complot contra la actual junta directiva".

Manzur precisó que bajo ningún punto de vista pueden ser considerados como socios minoritarios, teniendo en cuenta que en realidad son mayoría y que por el contrario, los minoritarios son aquellos que integran la actual junta directiva del club, que está haciendo lo imposible por que estas denuncias sobre las irregularidades que han cometido permanezcan en el más seguro hermetismo.

Para tal efecto, señaló, la directiva de Vainstein emplea métodos vedados, una suerte de "lobbies", en distintos medios de comunicación. "Situación en la que no ha caído la revista GENTE, que en su afán de informar con la verdad, como es su característica esencial, ha desentrañado todo lo que ellos han ocultado, en perjuicio de los socios y que ahora pretenden desautorizarnos haciéndose las víctimas. Es que en realidad, es imposible tapar el sol con un dedo, tal como intentan hacerlo", dijo enfáticamente Manzur.

Agregó que una muestra de estas serias irregularidades que no sólo se han realizado en la actual junta directiva, sino que se inician con la anterior que presidía Mario Villarán. Allí se pudo observar a través de la intermediación del tesorero Enrique Elías Laroza, que se cambió todas las computadoras del centro de cómputo señalando como argumento que tenían más de 25 años de antigüedad y estaban obsoletas, "cuando la verdad es que sólo tenían un año", precisó.

De igual forma, en un comunicado de la Asociación de Criadores y Propietarios a la que GENTE tuvo acceso se denuncia que "el total fracaso económico de la gestión de los cuatro años de la directiva anterior, ha ocasionado la grave crisis actual del JCP, con su consecuente incidencia en la casi paralización de la hípica peruana causadas por el despilfarro de gastos de operación y por costosas inversiones sobrevaluadas e innecesarias, cubiertas con fondos de endeudamiento, la desaparición del necesario capital de trabajo, la insuficiencia para pagar oportunamente premios a los propietarios e incluso con moras mayores que el diferimiento de pagos acordados por 60 y 180 días. Es decir, se han acumulado deudas por mas de 30 millones de dólares, además de sus agobiantes intereses, que se han convertido en una deuda de cerca del diez por ciento del patrimonio del JCP, lo cual terminó rompiendo la cadena económica del ciclo tradicional que da sustento a la hípica, pues la mayoría de propietarios impagos no pueden mantener sus caballos, ni cumplir sus compromisos con el personal que los cuida, con los profesionales que los entrenan y corren, con sus proveedores y menos aún con los criadores que les vendieron sus caballos. Sin embargo, el colmo es la injustificable inclusión de cláusulas entreguistas en los dos contratos de superficie por 40 años, aprobadas inválidamente por los mencionados anteriores directorios del JCP, sin autorización de asamblea alguna actuando impunemente contra su propia autorización de asamblea alguna, a la que han desvalorizado en más del 50 por ciento al afectar gravando y otorgando a terceros, derechos de preferencia y exclusividad, afectando no sólo las 13, más 14 hectáreas de terrenos de los contratos de superficie, si no, lo que es incalificable, el íntegro de las 112 hectáreas del predio y patrimonio del Hipódromo de Monterrico. En resumen y conclusión, destrozando el valor actual real de todos sus terrenos y por ende del importante patrimonio institucional, construido con el esfuerzo de más de 40 años de positivo desarrollo a un colapso que puede ser definitivo. A la fecha, la situación financiera de la institución se mantiene de milagro, arrastrando deudas en todos y cada uno de los sectores. Con acciones judiciales de cuantía respetable, que se viene perdiendo con escasas posibilidades de revertir el fallo. Los premios de aciertos en apuestas como la mulita se mantienen impagos sin inmediata esperanza de cumplimiento. A los propietarios no se les atiende las boletas vencidas, en fin, una realidad que verdaderamente da pena y resulta complicado admitir, el presente desesperado de una institución que está pagando el severísimo costo de dirigentes que fracasaron rotundamente".

Por su parte, Alejandro Orosco, connotado socio del Jockey Club del Perú, precisó que la impugnación a la asamblea del 5 de enero último y en donde, sobre la base de irregularidades, se aprobó la venta de dichos terrenos, está en pleno proceso. En ese sentido, indicó que el Poder Judicial dirá la última palabra.