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      Oscar Miró Quesada
      Cantuarias 
 
  


La importancia de la investigación El Dr. Oscar Miro Quesada Cantuarias, reconocido oncólogo peruano, ha dedicado sus más de 50 años de ejercicio profesional a la investigación científica. Ganador de la Beca de Estudios de posgrado Rockefeller, instructor de bioquímica en la prestigiosa Universidad de Yale y recientemente elegido por unanimidad Miembro Activo de la Academia de Ciencias de New York, el Dr. Miró Quesada no deja de plantearse nuevos retos. Concentrado en una nueva investigación para mejorar el tratamiento del cáncer y enterado de las últimas curas experimentales que han aparecido en el mundo sobre esta terrible enfermedad, el Dr. Oscar Miró Quesada nos cuenta todo, de su pasión por la investigación, de su familia e incluso de política.

¿Por qué decidió dedicarse al estudio y la investigación del cáncer?

Bueno, cuando yo estaba en el Instituto de Salud me dediqué a estudiar el cáncer experimentalmente con pericotes y ratones. Después, si no recuerdo mal, por el año 50 vino un alto funcionario del Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos a visitar Lima y el ministro de Salud, sabiendo que yo estaba haciendo estos trabajos, lo mandó al Instituto para que me viera. Entonces él me dijo: "Por lo que veo, como usted está trabajando nunca va a lograr lo que quiere, usted no tiene facilidades acá, por qué no se viene a Estados Unidos". Y yo le dije: "¿Y cómo voy a hacer?" "Usted no se preocupe, ya verá". Y como a los dos años me notificaron que tenía una beca en Nueva York y allí estuve tres años trabajando en investigación.

Hablar de cáncer resulta a veces algo confuso. ¿Qué es el cáncer?

Es que no se trata del cáncer, sino de cánceres. Hay trescientos cánceres diferentes. Cada uno tiene su particularidad y su tratamiento. Además, yo personalmente creo que el cáncer no es una enfermedad.

¿Por qué?

Simplemente porque es una cosa universal, que a todos los seres vivos les da. Eso no puede ser una enfermedad. Todos los seres vivos que conocemos desarrollan cáncer, incluyendo las plantas.

¿En qué sentido?

En que todas las células tienen la propiedad de convertirse en células cancerosas.

¿Es decir, básicamente todos los seres humanos somos propensos a tener cáncer?

Todos los seres vivos, las pulgas tienen cáncer, las moscas, los gusanos, los lagartos, los peces, las aves, todos tienen cáncer. Entonces, eso no puede ser una enfermedad. Es enfermedad en el ser humano o en un animal cuando ya produce trastornos, ya sea que produzca dolor o interfiera con el funcionamiento de su organismo. Ahí recién es una enfermedad, pero el hecho de que una célula se transforme en cancerosa es una cosa normal de la naturaleza.

Ahora, la quimioterapia es uno de los tratamientos usados contra el cáncer, pero ¿no es una cura, verdad?

Hay ciertos cánceres que sí cura. Por ejemplo, los cánceres llamados líquidos como la leucemia linfocítica aguda, en los niños. Esa la curamos con quimioterapia. Hay ciertos cánceres de seno, que cuando no están muy avanzados se curan con quimioterapia o con cirugía, si se agarra al comienzo. Se extirpa el tumor y se acabá.

¿Aparte de la quimioterapia o la cirugía, hay otros métodos que se están utilizando para curar efectivamente el cáncer?

Hay un método nuevo que se está utilizando y que es muy interesante, que se llama la antineoangiogénesis. La angiogénesis es la formación de vasos sanguníeos o linfáticos. Eso se produce cuando el ser biológico se está desarrollando. Ahora, el aparato circulatorio termina de formarse en la adolescencia, pero hay momentos en que de repente hay nueva formación de vasos sanguíneos, es decir neoangiogénesis. El doctor Folkman, de la Universidad de Harvard, y sus colaboradores han venido trabajando en esto hace como treinta años y llegaron a la conclusión de que los tumores cancerosos eran nuevos órganos, por lo tanto necesitaban irrigación de sangre que les dé oxígeno y comida. Entonces se produce formación de vasos, neoangiogénesis, cuando se produce un tumor. Hay ciertas substancias que él ha descubierto que bloquean la producción de nuevos vasos sanguíneos. Entonces, si se le corta la alimentación y el oxígeno, el tumor se chupa. Ese es el tratamiento antineoangiogénico. La quimioterapia son balas dirigidas contra el enemigo, la antineoangiogénesis viene a ser cortarle la logística al enemigo. Entonces el embrión sin alimento se asfixia y perece.

Eso sería un gran avance...

Pero además hay otra cosa. En la antineoangiogénesis no hay balas. Los vasos sanguíneos que se cortan no se vuelven a formar y entonces no hay resistencia. En cambio con la quimioterapia, muchas veces las células cancerosas, que son genéticamente muy inestables, se vuelven resistentes a la droga. En cambio con esto no hay ningún problema. Ojalá que las cosas funcionen, porque es espectacular Y además no intoxica.

No agota a la víctima como sí lo hace la quimioterapia.

Claro, porque las drogas anticancerosas, llamadas citotóxicas, son tóxicas para las células; no sólo para las malas, sino también para las buenas. Las drogas anticancerosas atacan principalmente a las células que están en activa reproducción como las células de la médula roja de los huesos, también el epitelio del intestino y el pilo sebáceo, que produce el pelo.

Aparte de la antineoangiogénesis, ¿hay otros proyectos de cura del cáncer?

Sí. Hay uno que a mí me parece espectacular. Hay unos trabajos de un doctor Steven Dowdy, que es de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington. Esto es bien reciente, del año 99. Las proteínas no pueden entrar a las células a través de la membrana celular. Ahora bien, estos señores encontraron que el virus del sida tiene una proteína muy especial, que ellos llaman proteína Dat. Esa proteína hace que el virus del sida se meta a través de las membranas de las células como si nada. Ellos han aislado esa proteína y la han unido a otras proteínas y las han inyectado en animales, en pericotes y ha penetrado en todos los tejidos, en el hígado, en el pulmón, en el cerebro, en los músculos, en todas partes. Y de esa forma han podido meter hasta cincuenta proteínas distintas en las células. Entonces, lo importante es esto, si conocemos la proteína defectuosa que está produciendo la enfermedad, podemos poner la proteína normal unida a esta proteína del virus y entonces se corrige la enfermedad. Sería fabuloso.

Sin embargo, todo esto aún está en experimentación.

Todas estas cosas están en estudio. Todavía tenemos que limitarnos a la quimioterapia, la cirugía y la radioterapia. Fuera del ámbito científico se ha hablado de curas para el cáncer, como la uña de gato. Sin embargo, ¿no está comprobado que sea una cura efectiva, verdad?

La uña de gato no cura el cáncer.

Yo creo que fui el primero que utilizó uña de gato en el Perú. Y me enteró de la uña de gato por el señor Oscar Schuler, quien era de Oxapampa. Según me contó él, su papá tenía una artritis traumatoidea que lo limitaba mucho. Entonces los nativos le dijeron que usara la uña de gato. Se la dio y se curó de la artritis. Pero además, según él, su papá tenía un tumor canceroso en el pulmón que también desapareció. No me consta, pero eso es lo que contaron. Bueno, yo utilizó la uña de gato en tres pacientes pero no obtuve ningún resultado. Después se han interesado laboratorios de Italia, Austria y Alemania y han encontrado cosas muy interesantes. Aparentemente es un gran estimulante y tónico del sistema de defensa inmunológico, que es el sistema que nos defiende del cáncer.

Es decir, funciona como una especie de protección contra el cáncer.

Sí. Ahora hay varios colegas en Ucrania que están usando mucho la uña de gato, pero superconcentrada, en forma liofilizada, para tratar pacientes que fueron irradiados en la explosión de la planta termonuclear de Chernobyl. Varios de esos pacientes están siendo tratados con uña de gato y, según dijeron ellos, con muy buenos resultados, en el sentido de que no les ha producido leucemia.

¿Usted ha hecho investigaciones al respecto?

Hay ciertos pigmentos de plantas que yo pienso que pueden ser sumamente importantes para el tratamiento del cáncer. He comenzado a hacer el trabajo y ya aisló un pigmento que me interesa mucho, pero lo que me falta es la experimentación en animales con tumores. La idea es ésta: asociando el pigmento a las drogas anticancerosas, posiblemente puedo bajar la dosis de la droga a un mínimo que no intoxique al paciente. Entonces puedo seguir tratando sin intoxicar al paciente hasta borrar la última célula maligna que tiene el cuerpo. Ahora, hay que demostrarlo experimentalmente y en eso estoy trabajando. Es una semilla prácticamente peruana, los carotenoides.

¿Y cómo ve el panorama de la salud en nuestro país?

Desgraciadamente yo creo que todavía nos falta mucho, no todos los peruanos tienen acceso a la salud. Yo calculo que acceso a la salud tendremos quién sabe la mitad y no sé si llegamos a la mitad de los peruanos. La mayoría se trata con remedios caseros o plantas.

¿Recuerda algún personaje en especial que lo haya impresionado?

El único personaje que recuerdo que me impactó mucho fue Alexander Fleming, el descubridor de la penicilina Lo conocí mientras hacía mi posgrado en Estados Unidos. él llegó ahí para dar una charla sobre su descubrimiento y me impresionó mucho por lo sencillo que era, sencillísimo el escocesito. Era chato, coloradito, pero extraordinario.

El apellido Miró Quesada es parte de la historia peruana. ¿Qué ha representado para usted ser parte de esta familia?

Para mí es un orgullo, sobre todo porque mi padre, que era Racso, era un hombre extraordinario y nos inculcró a mí y a mi hermano las ideas racionales. De ahí mi hermano, el que me sigue, se ha dedicado a la filosofía y yo me he dedicado a la parte científica.

¿Qué recuerdos guarda de Racso?

Muchos recuerdos. Le encantaba bailar, era un gran bailarín. Mi papá ha fallecido a los 97 años, pero a los 84 estaba bailando conga en Chosica. Y él decía, porque él tenía varios dichos: "He conocido muchas cosas, he experimentado muchas cosas, he conocido mucha gente, pero nunca he podido comprender la crueldad".

Su familia ha debido pasar por grandes dificultades, expropiaciones, persecuciones políticas. ¿Qué capítulo recuerda especialmente?

En la época del gobierno del señor Leguía, toda mi familia estaba perseguida, porque eran de oposición al régimen. Entonces mi papá dejó la casa donde vivíamos y a mi mamá, a mí y a mi hermano nos llevó a casa de mi abuelita materna. Y a veces por la noche, por el techo se sentían ruidos y mi mamá y mi abuelita se ponían nerviosas. Y el ruido resultó que era mi papá que venía a ver a mi mamá, todo andrajoso como pordiosero, con barba y sombrero para que no lo fueran a agarrar.

¿Es cierto que Betty di Roma, provocó un escándalo en su familia?

Ella fue enamorada de mi hermano menor, Alfonso.

¡Qué recuerdo!

Muy grato, estaban muy enamorados, desgraciadamente a la mamá de mi hermano, que era mi madrastra, no le agradaba esa relación y se rompió. Y yo estoy seguro de que hubieran sido sumamente felices si los hubieran dejado seguir su relación.

"Fujimori ha salvado al país" En estos momentos el país está atravesando por una situación crítica, ¿qué opina usted de lo que está sucediendo?

El contexto para mí es preocupante por la simple razón de los políticos. Para mí los políticos están arruinando al país. Yo considero por ejemplo, que el presidente Fujimori es un hombre al que atacan por todos lados y él lo que quiere hacer es el bien por el Perú. Hasta este momento es uno de los presidentes que más provecho le ha hecho al país, porque lo ha salvado de desaparecer del mapa geopolítico. Además, ha terminado con el terrorismo, antes terminó con la bancarrota en la que nos dejó el gobierno aprista, terminó con el lío contra Ecuador, ha terminado con el problema con Chile, ha arreglado todo y sin embargo se le ataca permanentemente. Yo creo que a un hombre que ha salvado al país debe premiársele y no lapidarlo.

¿Qué opina sobre las críticas respecto a los atentados en contra de los derechos humanos y la inconstitucionalidad de la re-reelección?

...Bueno, eso de la reelección va contra la Constitución, pero para mí es una forma de que el Perú salga adelante, porque si se cambian las reglas del juego se acaba todo lo que ha hecho Fujimori. Eso es lo que hay que evitar.

¿En su época, la juventud estaba más interesada en participar en política?

La época en la que yo era estudiante había un gran enfrentamiento entre el Partido Aprista, que quería tomar todo, y nosotros, que no éramos apristas. Ahí era la pugna. Había líos, había trompeadera.

¿Cree usted que era una generación más comprometida?

Sí.

¿Por qué ahora no?

Para mí, porque la juventud está desilusionada, se siente frustrada, los mayores no hemos hecho lo que debíamos haber hecho por la juventud. Bueno, yo sí he hecho lo que he podido, pero en general eso es lo que pasa. Para mí es una generación que se siente perdida, frustrada, no le han dado la mano.

¿Qué cree que se debería hacer?

Que los mayores se acerquen a los jóvenes, que se forme una fraternidad entre jóvenes y viejos. Eso es importantísimo, por la experiencia que tenemos nosotros. Tener un diálogo.

Finalmente, ¿cuáles son sus expectativas sobre el país?

Yo tengo mucha fe en los peruanos. Yo creo que el peruano en general es muy inteligente y muy intuitivo. Donde va el peruano siempre triunfa, menos en el Perú. Me parece que hay mucha pugna entre los peruanos. Hay envidias, es un lío y no sé por qué. Pienso que hemos heredado dos herencias malditas. La de los españoles y los incas. Huáscar y Atahualpa eran hermanones del alma y comenzaron a pelearse entre ellos, vinieron cinco españoles y los liquidaron porque estaban en pleito. Entre los españoles, Almagro y Pizarro hicieron lo mismo, uno mató al otro. Entonces, hay envidias, hay odios, hay mezquindades. Lo único que puede salvar eso es la educación racional.


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